Capítulo 190

Dos días más… en donde si pude disfrutar de la playa, en donde las caminatas de la mano de mi novio eran las mejores. Y ya era casi una rutina vacacionaria que comiéramos en la playa, si comíamos, porque como nos acostábamos bastante tarde, nos levantábamos así tambien, para salir directo hacia aquel lugar que nos hacía divertirnos un montón. Y ya no le pedíamos que no nos tiren al agua mientras nosotras tomábamos sol… porque sabíamos que era en vano. Compartir mates, charlas y pasarla super bien. Para luego volver a la casa, bañarnos, pensar que o donde cenaríamos y luego cambiarnos para salir a disfrutar la noche.
El jueves a la noche, ya madrugada de viernes… nos encontraba a todos en Molino Rojo, otro de los boliches de aquella cuidad que tanto estábamos disfrutando.
Y bailábamos con las chicas ese reggeaton que nos encantaba, hasta que aquella pequeña ronda que formábamos las cinco… se fue desarmando con la llegada de cada uno de nuestros novios que nos tomaba de la cintura.

Lali: (me di vuelta para enfrentarme a él y hablarle en su oído) Ya me estaba preocupando que no vinieras!
Peter: (me sonrió para luego besarme mientras con una mano me tomaba de la cintura y en la otra tenia un vaso con una extraña bebida azúl, de la cual tomó un trago cuando se separó de mis labios) Querés?
Lali: Dale, (le sonreí) un poquito… (y bueno, me intrigaba saber que era. El reggeaton se transformó en cuarteto y todo el boliche se revolucionó, incluido Peter. Que sin pensarlo le pasó el vaso a Nico y me tomó de ambas manos para que juntos empecemos a bailar. Y como no reírme de esas caras que el hacía, de las hermosas sonrisas que me regalaba y los besos que entre vuelta y vuelta dejaba en mis labios.)

Cuatro de la mañana y nosotros entrábamos a la casa. Si, nos volvimos antes… hoy nos tocaba la famosa y codiciada “habitación matrimonial” y sabía que él no iba a desperdiciar esa oportunidad.

Lali: Mmm… peter, (beso) paraa… (otro beso) para un poquito! (intentaba despegarlo de mi) Dale Pit! (cambiando mi tono) Gordo… (y si, se dio cuenta)
Peter: Que… que pasa? (mientras seguía depositando besos en mi cara)
Lali: Nada, que te calmes un poquito… (se separó de mi y cerré la puerta, porque si, ni eso me había dejado hacer) Estás como loco che! (y me reí al darme vuelta y ver su cara) Ni cerrar la puerta me dejaste nene! (me crucé de brazos)
Peter: (me miró con esa cara de pícaro que tiene y su sonrisa no tardó en aparecer, la mía tampoco… vino hasta mi y me abrazó bastante fuerte) No te enojes polvorita! (dejó un beso en mi hombro y me miró)
Lali: No me enojo! Pero es que estás... nose, como con la idea fija y (bese la trompita que me estaba haciendo) a mi no me gusta (le di otro beso mas. Si, me podía demasiado) que estés así (otro beso mas y mis brazos rodearon su cuello) Porque es como que (otro beso y sentí como empezaba a caminar para atrás) todo el tiempo estas… (lo continué besando y ni me acuerdo lo que le iba a decir)
Peter: (en la puerta de la habitación se freno) Todo el tiempo estoy que? (esa cara de seductor nato, que lo delata. Bastó una risa mía para que me levantara en sus brazos, cerrara la puerta con el pie y me besara hasta llegar a la cama.)

Y sabía que íbamos a terminar haciendo el amor… así como el sabía que su sonrisa me podía totalmente y como yo sabía que no me podía resistir a él. Cuando su remera ya estaba en el piso, comenzó a besarme el cuello y fue bajando hasta tener que desabrochar los dos botones que tenía mi camisa blanca… volvió a besar mi boca y cuando paramos para sonreír, se levantó de la cama. Y yo lo miré muy extrañada… pero entendí todo cuando lo vi que fue hasta la puerta para cerrarla con llave.
Y nos entregamos nuevamente… como siempre, o como nunca, porque cada momento con él era único. Nuestro amor es único. Y soportó tantas cosas que lo menos que se merece es que lo dejemos ser, y eso implica que ambos seamos felices.
Y hoy, con mi cabeza hundida en su cuello y sus brazos rodeándome, despues de haber estado juntos, puedo decir que somos muy felices y que no hay otro lugar en el mundo en donde quiera estar.